Escoger el Hotel de Camprodon para hospedarse es acercarse a lugares espectaculares y actividades al aire libre. El Valle de Camprodón está lleno de rincones para descubrir en todas sus ocasiones, tanto una escapada romántica o unas vacaciones en familia.
El Ripollés es una comarca relativamente pequeña, así que a muy pocos kilómetros de distancia, tienes una multitud de propuestas que no te dejarán indiferente.
¡Ven a descubrirlas!
Sumérgete en la belleza natural y cultural de Camprodón y sus alrededores con una amplia variedad de actividades. Desde pueblos encantadores hasta impresionantes paisajes montañosos, pasando por festivales locales y gastronomía deliciosa, ¡hay algo para todos en esta maravillosa región!
Camprodón es un pequeño pueblo de origen medieval. De esta época se conserva el Pont Nou o Puente Romano y el monasterio de San Pedro como máximos exponentes.
Camprodón tiene una larga tradición turística, convirtiéndose ya desde medianos del siglo XX en un lugar de veraneo de la burguesía catalana. Se conservan numerosos edificios (como el Hotel Camprodon), además del Paseo Maristany o el Paseo de la Font Nova.
Hoy en día es un pueblo animado, con comercios y actividades todo el año.
El Valle de Camprodón está llena de pueblecitos de aire romántico, y pintoresco. Uno de sus mas claros ejemplos es el de Beget. Otros pueblos a destacar son Molló, Fabert y Espinavell.
Enfilando el valle, encontramos Llanars, Vilallonga de Ter, Tregurá y la Roca y Abella, que ofrecen esplendidas vistas del valle.
No hay que olvidar Setcases, antes de llegar a Vallter, y Sant Pau de Seguries, que limita el valle por el sud.
También en el Ripollés, y en el territorio del Valle de Ribes, encontramos el Valle de Núria, un santuario y montañas muy populares y de paisaje típico pirenaico.
Se puede acceder con el tren cremallera, y es un punto estratégico para iniciar rutas de senderismo o de esquí de montaña durante el invierno.
Cuenta también con pistas de esquí y numerosos equipamientos lúdicos para disfrutar en familia.
Ripoll es la Capital de la comarca del Ripollés, y una ciudad con un patrimonio histórico muy rico. Aquí encontramos uno de los exponentes más importantes del arte Románico en Cataluña, especialmente por su significado histórico: El monasterio de Santa María de Ripoll. Fundado por el Compte Guifré el Pelós (año 879), fue un centro cultural prolífico de la Cataluña medieval y considerado como el inicio de la Cataluña vieja. Su portalada (s. Xll) está considerada uno de los monumentos románicos más importantes del mundo.
Camprodón está al lado de la comarca de la Garrotxa, una zona muy conocida por sus 40 conos volcánicos y más de 20 coladas de lava, que rodean la ciudad de Olot y caracterizan todo el paisaje, formando el Parque Natural de la Zona Volcánica de la Garrotxa.
En la Garrotxa también encontramos el Hayedo de Jordà, un hayedo excepcional por haber nacido sobre una colada de lava (dejando un paisaje de cuento de hadas) y habiéndolo hecho en una altitud más elevada que de costumbre.
El pueblo de Camprodón es uno de los más turísticos de los Pirineos, con mucha afluencia de visitantes durante todo el año. Algunas épocas a destacar por su importancia cultural son la Semana Santa, cuando se celebra la Procesión de los Santos Misterios y que ya tiene más de 30 años de historia, el día de la Purísima, las fiestas de Navidad y Fin de año. Destacamos también dos fechas de peregrinación a dos ermitas de Camprodón: el 13 de junio se hace un encuentro en San Antonio, con una misa y sardanas. El día 13 octubre, el encuentro en la ermita de los Remedios.
La gastronomía del Ripollés es la cocina típica de montaña, con un recetario que incluye, embutidos de cerdo, quesos, la caza, y la carne de ternera, cordero y potro. Estos productos tan apreciados alimentan los fogones de los restaurantes de la zona. En los colectivos de Fogons de la Vall de Ribes y Cuines de la Vall de Camprodón encontraréis los establecimientos donde comer más auténticamente y menús de temporada.
El Hotel de Camprodon es un ejemplo, ofreciendo menús de temporada y colaborando en rutas gastronómicas del territorio.